Castilla Termal Olmedo, un destino para vivir una experiencia integral que fusiona relax, wellness, salud, gastronomía y tradición

Nos remontamos al siglo XII, entre los muros del antiguo convento de Sancti Spíritus en la Villa de Olmedo, ubicado en Valladolid.  La capital del mudéjar castellano nos obsequia con un oasis como lo es el Hotel Castilla Termal Balneario de Olmedo, ubicado entre los verdes paisajes que ofrece Castilla y León, tan histórica y cultural.  

De esta construcción monacal se conserva el claustro y la bóveda de la iglesia, y sobre sus restos se construyó dicho balneario en el año 2005. Sus edificios anejos permiten una visita continuada a los huéspedes, haciéndolos sentir en todo momento dentro del mismo monasterio. Es una arquitectura única que regala historia, vanguardia, tradición, exclusividad y, sobre todo, bienestar. 

Castilla Termal tiene alma sostenible

Desde sus inicios este espacio, como todos los que se integran en la cadena, ha contribuido hacia la sostenibilidad, procurando en cada detalle el cuidado y la protección del medioambiente. Su misión lo deja muy claro: “Ser la primera cadena 100% sostenible de España”, y probablemente muy pronto lo logre con la implementación de paneles solares. La cantidad de placas a instalar dependerán de su consumo, y esto para Castilla Termal es pan comido, puesto que ya son expertos en ahorrar energía.

Apenas ingresas al hotel, al realizar el check-in, te proporcionan un tarjetero que además de permitir tu entrada a la habitación, puedes activar y desactivar lo que requiere consumo energético. El ahorro también lo logran utilizando bombillas tipo led o de bajo consumo A++, los mini bares dispuestos en las 82 habitaciones cuentan con la misma eficiencia energética. 

Entre sus atractivos ecológicos está el software de control de consumos, que permite detectar y corregir el gasto innecesario de agua y energía. Añadido a ello, todos sus grifos cuentan con economizadores y aireadores de agua, lo que permite el ahorro de hasta un 45% en su uso sin perder presión. 

Castilla Termal también elimina el empaquetado plástico innecesario de gorros y zapatillas, así como el plástico de un solo uso en los amenities de las habitaciones; el gel y el champú los presentan en dosificadores de 330 ml y los artículos de higiene que proporcionan están realizados con madera, bambú, o pasta de maíz. 

Otro aspecto muy valioso es que hacen uso de la biomasa, materia orgánica susceptible de ser utilizada como fuente de energía, que, al ser limpia y renovable, permite la climatización del calor y el agua caliente en sus instalaciones. Por otra parte, su sistema de recuperación rotacional de aire exterior contribuye a alcanzar la temperatura ideal con un ahorro de energía del 30%, y, en consecuencia, proporciona a sus visitantes el disfrute de un aire más saludable. 

Su sostenibilidad no tiene fronteras 

Este maravilloso complejo hotelero cuenta con una línea de productos cosméticos 100% naturales, sin siliconas, aceites naturales, ni parabenos. Entre ellos podrás encontrar cremas faciales, cremas hidratantes, aceites corporales, geles, peelings, champús y agua termal en spray, que es uno de los best sellers de la gama.  Están a disposición en cada una de sus habitaciones y por supuesto, para la venta en el mismo hotel. También los puedes adquirir en su tienda online: https://tienda.castillatermal.com/

La base acuosa que utilizan para su producción procede de las aguas minero-medicinales del manantial de Sancti Spíritus, que surgen de las entrañas de la tierra, filtrándose durante años, por lo que aportan un enorme contenido mineral a quienes se benefician de ellas.  Estas han corrido de boca en boca durante generaciones. La leyenda cuenta que las aguas bajo el antiguo convento tenían poderes curativos, y así es, puesto que su composición aporta propiedades terapéuticas.

El uso rehabilitador de las aguas, mejor conocido como hidroterapia, contribuye al tratamiento y mejora de algunas afecciones de la dermis como los eczemas y la psoriasis y contribuye a eliminar el estrés. 

El Estado avaló su utilidad terapéutica mediante su declaración de Utilidad Pública, y gracias a ello, ocho siglos después, seguimos teniendo la dicha de su provecho. Esta sustancia liquida se ha convertido en la mayor responsable de que el humilde convento mudéjar haya pasado a convertirse en el primer hotel balneario de 4 estrellas de Castilla y León.

Entrar en Castilla Termal Olmedo es una mezcla única de sensaciones 

Sus aguas están catalogadas como hipotermales (formadas a alta temperatura), de mineralización fuerte, clorurada sódica. Sus oligoelementos son aprovechados mediante su aplicación en baños de vapor, baños de contraste, duchas de sensaciones, piscinas y chorros. 

Las duchas escocesas son espectaculares. Gracias a su sistema de inyección en varios grados de presión, alivian las tensiones musculares en la zona lumbar, cuello y espalda. 

Y por supuesto, no podemos dejar de mencionar el agradabilísimo aroma del eucalipto en el baño de vapor con humedad al 100%; su acción despeja las vías respiratorias en el acto, entre otras tantas propiedades beneficiosas que brindan sus hojas secas a nuestra salud. 

Es así como Castilla Termal obsequia a cada uno de sus visitantes una experiencia completa de bienestar en un entorno sostenible e innovador, mejor conocida dentro de sus instalaciones como la experiencia Tantum. Son olores, gustos, texturas sensoriales, y una música muy relajante, casi imperceptible.

En este precioso lugar el aroma protagonista no solo es el eucalipto. El hollejo (piel de la uva) y su semilla no se quedan atrás. Estos restos son aplicados sobre nuestra piel en las manos de expertos profesionales expertos en wellness.

La mayoría de ellos son de la zona, por lo que podemos decir que el talento que trabaja en el balneario, con mucho mimo y exquisita atención, es casi 100% local. 

Cada uno de ellos te regala una sonrisa en su trato, procuran tu satisfacción personal en cada tratamiento, y, por supuesto, no dudan en preguntar sobre tu experiencia. En definitiva, su atención al público es inmejorable.

La uva en su vino, blanco y tinto

La distinción llega a tu paladar en este entorno enoturístico. Así lo respaldan los galardones “Premio Zarcillo de Plata en la XVII Edición de los Premios Zarcillo” y el “Premio Bacchus de Oro en el XVIII Certamen Internacional de Vinos Bacchus”.

Su vino Converso proviene del lugar en el que se asientan sus bodegas, ubicadas en lo que se conoce como “La milla de oro” de la Ribera del Duero. De su seleccionada vendimia, actualmente en su añada 2018, tiene una producción limitada de 18.000 botellas. Es un vino con carácter, y exclusivo en todos sus matices. Con tonos entre azulados y granates, reflejan juventud y su permanencia en la madera. El fruto negro, típico de la variedad, con sensaciones de vainilla, lácteos y cuero al olfato. Mientras que en la boca concede un paso amable, que verifica su sensación láctea y de fruta madura. 

Los visitantes lo acompañan en los embutidos, pastas, arroces, platos de cuchara, pescados y carnes a la parrilla o al horno que ofrece Castilla Termal en sus restaurantes a la carta y gastronómico. Especializados en cocina de mercado y regional, ofrecen los mejores productos (principalmente ecológicos) de la zona de Olmedo. Al ser cocina kilómetro cero, garantiza una alta calidad y como insignia ya mencionada: un mayor respeto al medio ambiente. 

Sus platos son muy variados y van cambiando según la temporada. Utilizan carnes de primera calidad tales como el lechazo asado, el churrasco y el solomillo. Además de pescados y mariscos frescos como la lubina o la brocheta de langostinos. Y por supuesto, no puede faltar uno de sus platos más demandados: el delicioso bacalao a la Olmedana. 

En Villarrazo Madrid somos amantes del dulce, por lo que les recomendamos sin duda alguna su hojaldre de manzanas asadas bañadas en canela, al igual que la torrija, tan tradicional en nuestra tierra, rellena con una ligera crema pastelera que te hará chupar los dedos. 

Existen mil y una razones para regresar

Castilla Termal Balneario de Olmedo es un lugar emblemático como pocos. Su monasterio, fundado por la infanta Sancha Raimùndez en el año 1128, fue uno de los primeros conventos femeninos que hubo en España. Por él pasaron personajes emblemáticos del clero y la monarquía española, como la beata Teresa de Jesús/ de Ávila y la reina Juana I de Castilla, conocida como “Juana la Loca”. 

Pisar su suelo y escuchar esto, entre otros tantos relatos originales, deja atónitos a todos sus visitantes. Es un momento único en el que la vista se deja llevar por la sorpresa, ya que todos sus detalles dan de que hablar. 

Y es que la aventura no termina en Olmedo, al ser Castilla Termal una cadena hotelera de alta gama con cuatro hoteles, y un quinto establecimiento previsto para el año 2022 en Brihuega.

Ubicado también en Castilla y León, podrás visitar el monasterio cisterciense del siglo XII mejor conservado de Europa (Castilla Termal Valbuena), y el emblemático edificio del siglo XVI como lo es la antigua Universidad de Santa Catalina (Castilla Termal Burgo de Osma). Mientras que, al norte de España, cerca de Santander, podrás disfrutar de Castilla Termal Solares en una edificación histórica inspirada en la Belle Époque de finales del siglo XIX.

Cada una de sus propuestas tienen un plan para ti.  En esta temporada mágica te invitamos a que vivas una Navidad relajante durante la Nochebuena, el día de Navidad y Nochevieja en los mejores templos de bienestar. ¡Reserva tu plaza cuanto antes! Te facilitamos el enlace a su página web: https://www.castillatermal.com/experiencias/.

Ladrillo y adobe cobijan este fascinante complejo hotelero, con una propuesta sin par y sostenible que te obsequia el mayor de los regalos: tiempo para ti, para compartir con tu pareja o familia.  En Castilla Termal siempre hay un plan, una experiencia integral que engloba actividades tranquilas o muy dinámicas, enológicas, culturales y gastronómicas. Te invitamos a que los visites y te obsequies bienestar y felicidad.